RUTA 1: SORIA CAPITAL

Iniciaremos nuestras rutas por el románico soriano en el corazón de la provincia, Soria ciudad, en la que se encuentran, probablemente, dos de los edificios más importantes y conocidos del románico español: la iglesia de Santo Domingo y el monasterio de San Juan de Duero. En total conoceremos cinco fábricas y el orden en que las visitéis es indistinto. En nuestro caso optamos por ocupar la mañana con Santo Domingo (foto 1) y el monasterio de San Juan (foto 2), dejando para después del almuerzo las tres restantes.

SANTO DOMINGO DE SORIA. VISTA DESDE PONIENTE.

Como las distancias no son excesivas, os aconsejamos hacer el recorrido completo a pie, pues es una delicia pasear junto al río, sobre todo si no es pleno verano. Casi todos los edificios están sujetos a horario, que podéis consultar en este enlace de la página oficial de Turismo de Soria. Lo más interesante de Santo Domingo es su espectacular fachada de poniente (foto superior) que, al atardecer, ofrece las mejores instantáneas.

MONASTERIO DE SAN JUAN DE DUERO. RUINAS DE SAN NICOLÁS. SAN JUAN DE RABANERA. CONCATEDRAL DE SAN PEDRO. CLAUSTRO.

Abandonaremos Santo Domingo y descenderemos al río Duero, que salvaremos por el puente de la N-234 que une Soria con Calatayud, ya en tierras zaragozanas. Pasado el puente, un breve paseo paralelo a las aguas nos conduce hasta San Juan, en nuestra opinión, la joya de la capital soriana. La magnificencia de su claustro no os debe hacer olvidar que el interior de la iglesia también guarda otra obra maestra del románico: los dos templetes con excelentes capiteles esculpidos.
Dejaremos los muros del claustro y regresaremos al centro de la capital para descansar en cualquiera de sus terrazas y reponer fuerzas. Por la tarde, junto a la Calle Real, nos acercaremos hasta las ruinas de San Nicolás (foto 3), en cuyo ábside se descubrieron en 1977 pinturas murales góticas en las que se representó el asesinato de Santo Tomás Becket, arzobispo de Canterbury. De San Nicolás es la portada que hoy luce en la fachada de poniente de la iglesia de San Juan de Rabanera, nuestra siguiente parada
. Para finalizar, a poca distancia de San Juan, la concatedral de San Pedro (comparte sede con el Burgo de Osma), cuyo claustro es otra de las joyas con que esta pequeña ciudad castellana nos recibe, pondrá cierre a este breve pero intenso recorrido por el patrimonio monumental soriano.
Y si estamos en Soria, por supuesto, no podemos dejar de hablar de su otro gran reclamo turístico: la figura del poeta Antonio Machado, quien residió en ella de 1907 a 1912, dejándonos una de las obras más importantes de la poesía en castellano: "Campos de Castilla". En la Oficina de Turismo os darán cumplida información sobre los lugares machadianos que uno no debe perderse. En este enlace tenéis un adelanto: La Huella de Machado en Soria.